Mi bisabuela había estado en la Revolución, a ella sus papás la escondían en el sótano, porque los militares pasaban todas las tardes a sus casas para robar la poca comida. A mi bisabuela la encerraban junto con sus hermanos y comían puras tortillas y habas. Así estuvieron durante toda la Revolución porque si salían las mujeres loa hombres se las llevaban para casarse con ellas.
Karla Célic
No hay comentarios:
Publicar un comentario